Brecha – Los Centros de permanencia temporaria – Derechos en suspenso


Los centros de permanencia temporaria (Cpt) son los lugares donde en Europa se hacina a los inmigrantes ilegales, los que piden asilo y los clandestinos. No cometieron ningún crimen, pero están presos y destinados a ser expulsados. Gennaro Carotenuto


?En los centros de detención temporal de toda Europa a diario se registran abusos y violaciones de derechos básicos, empezando por el de asilo. Además hay una creciente tendencia a mezclar inmigrantes irregulares con gente que solicita asilo político. Es evidente que hay que cerrar todos los cpt?, denunció el lunes 20 Amnistía Internacional. Esta ong se sumó así a instituciones como el Consejo de Europa, la Secretaría General de la onu para los Migrantes, el Comité de Prevención de la Tortura, la Corte Europea de los Derechos Humanos…

Hoy en Europa los inmigrantes indocumentados son el más fenomenal catalizador de alarma social. Su criminalización es fomentada por los grandes medios de comunicación y los políticos de derecha. Se los encierra, o se los esconde hasta que su destino sea decidido. No están presos, pero no pueden salir. Son hombres, mujeres y niños ?en suspenso?. Durante algunas semanas, o incluso meses, permanecen incomunicados, sin contacto con el mundo exterior. Imposible establecer con exactitud cuántos son y en qué centros ?a menudo privados o semiprivados? se hallan.

QUÉ HACER. Esta misma semana concluyó positivamente la odisea de una mujer china residente en Florencia, Italia, donde llegó hace veinte años. La señora guardaba cuidadosamente su permiso de residencia en su casa cuando fue detenida por la policía. No le creyeron y se la llevaron. Por veinte días, durante los cuales sus dos hijos menores la buscaron desesperadamente, esta mujer transitó por dos Cpt. Dos jueces de paz tampoco le creyeron, y determinaron su expulsión. Un día antes de ser deportada su situación se aclaró.

En España, uno de los más siniestros Cpt es el de La Verneda, en Barcelona, conocido como la Guantánamo catalana. La pasada Navidad cuerpos policiales especiales irrumpieron violentamente en el centro para reprimir una pacífica huelga de hambre. Al término de la huelga 50 de sus impulsores fueron expulsados hacia Colombia y Ecuador.

En Alemania, donde los Cpt se abrieron muy precozmente, en la primera mitad de los noventa, y donde la detención de los indocumentados puede prolongarse hasta un año y medio, según cálculos cruzados realizados por BRECHA a partir de informes de distintos orígenes, en la última década se han producido entre cien y doscientos casos de suicidio. A pesar de esto, hay que reconocer que en ese país viven 960 mil refugiados, más del doble que en Estados Unidos.

En los campos de Bélgica, el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas ha denunciado continuos casos de ?detenciones arbitrarias, que pueden dar lugar a tratos inhumanos y degradantes?. La gente que vive en los Cpt belgas, señala ese organismo, lo hace ?en condiciones sanitarias y sociales precarias?. Un menor originario de Guinea-Bissau fue llevado directamente a un Cpt desde el aeropuerto de Bruselas, donde había formalizado el pedido de asilo a su arribo al país. Aunque dos tribunales ordenaron su puesta en libertad, fue detenido durante ocho meses bajo continua amenaza de expulsión, en condiciones denigrantes y con privación de alimentos.
En la isla griega de Lesbos, en febrero último se denunciaba que 186 menores, junto a otros 700 refugiados, estaban detenidos en situación de ?hacinamiento extremo?.

En Francia es habitual que a los Cpt vayan a parar niños solos, aun cuando sus padres residan legalmente en el país. Una ley impulsada en 2003 por el actual líder de la derecha Nicolás Sarkozy legitimó estos centros. Recién en diciembre de 2004 el Tribunal de Apelación de París resolvió que estas zonas de detención debían ser consideradas, a fines legales, como parte del territorio francés, y que por lo tanto los jueces tenían competencia para examinar los casos que allí se dieran.

En Gran Bretaña, uno de los países más duros con la inmigración, hasta 1993 cerca del 80 por ciento de las solicitudes de asilo eran respondidas positivamente. Hoy esta cifra ha bajado al 4 por ciento. Los Cpt tienen tan mala fama que ningún gobierno puede reivindicarlos abiertamente como una solución. El Ejecutivo británico, con el apoyo de Italia, Francia y Alemania, está impulsando actualmente una ?solución final? consistente en transferir los Cpt desde Europa hacia el norte de África, los Balcanes, Ucrania. Allí los migrantes estarán libres de desaparecer. Europa, como siempre, mirará hacia otro lado.