Brecha – Contra el terrorismo de Estado Tribunal internacional

En La Habana se convocó oficialmente a la creación de un Tribunal contra el Terrorismo y en Defensa de la Humanidad para juzgar ?al menos política y éticamente? 50 años de crímenes de lesa humanidad en América Latina.


GC desde La Habana


Esa fue la primera consecuencia concreta del encuentro contra el terrorismo celebrado entre el jueves 2 y el sábado 4. El tribunal propuesto, que es patrocinado por el Encuentro Mundial de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad y que casi seguramente tendrá sede en Caracas, retoma la tradición del prestigioso Tribunal Russell, que en los años setenta esclareció numerosos crímenes de lesa humanidad, incluyendo los de las dictaduras del Cono Sur. Su objetivo es juzgar, y en lo posible condenar, a los impulsores del terrorismo de Estado en el hemisferio, incluyendo a Henry Kissinger y a la dinastía Bush: George padre, ex presidente y jefe de la cia en los años setenta, George hijo, actual presidente, y su hermano Jebb, gobernador de Florida y que debe su poder a la Fundación Nacional Cubano-Americana, íntimamente ligada a terroristas condenados, como Luis Posada Carriles.
 
Para integrar el tribunal serán convocadas personalidades de América Latina y del mundo, entre las cuales Noam Chomsky, Ramsey Clark, Harry Belafonte, Danielle Mitterrand, Ken Loach, Adolfo Pérez Esquivel, Samir Amin, Dario Fo, François Houtart, Pablo González Casanova, Alfonso Sastre.
 
En palabras del presidente cubano, Fidel Castro, esta instancia puede contribuir a esclarecer lo que aparece como un único diseño criminal, que toma distintas formas de organización y sustenta golpes de Estado y dictaduras militares: el Plan Cóndor, las guerras sucias en América Central, las guerras de baja intensidad, el terrorismo que desde Miami se expande no sólo hacia Cuba sino a todo el continente, incluyendo el mismo territorio de Estados Unidos. Según Castro, este diseño no sólo constituye una de las páginas más negras de la historia de la humanidad sino que se ha convertido en un símbolo de las políticas imperialistas y neocolonialistas impulsadas por Estados Unidos.
 
El tribunal se propone fundamentar jurídicamente juicios que ya se estén desarrollando contra acusados de terrorismo o contribuir a que tengan lugar otros hoy inviables. En el caso del pedido de extradición de Posada Carriles por Venezuela, las pruebas son tan contundentes que hasta ahora el gobierno de Bush sólo ha respondido con el silencio. De estar ya operativo el tribunal, a Estados Unidos esa postura se le haría insostenible.
 
Romper el circuito informativo comercial y sus códigos interpretativos, que consideran a Washington como paladín de la lucha contra el terrorismo, es otro de los objetivos. Para lograrlo, el tribunal contará con una importante estructura informativa: un observatorio y un gran centro de documentación mundial sobre el terrorismo de Estado, alimentado por los archivos ya existentes (por ejemplo los del Plan Cóndor encontrados en Paraguay) y nueva documentación. Completarán la estructura un grupo de difusión del material recopilado (que será distribuido tanto a los medios independientes como a los oficiales) y un centro de elaboración y difusión de informaciones.
 
Además, las sesiones del tribunal serán difundidas por Telesur, la tevé satelital ?latinoamericana y latinoamericanista? que comenzará a trasmitir regularmente el 24 de julio, aniversario del nacimiento de Simón Bolívar. En los próximos días, esta señal emitirá una serie de videos en cinco idiomas sobre los temas de que se ocupará el tribunal, desde el Plan Cóndor a casos como el asesinato de Orlando Letelier y el atentado contra el avión de Cubana de Aviación en 1975.