Brecha – Tragedia en Gaza: “Falla técnica”

La muerte de 19 palestinos, entre ellos numerosos niños, la semana pasada en la localidad de Beit Hanoun (Gaza) por proyectiles de artillería israelíes, se produjo por una combinación de fallo tecnológico y de incumplimiento de procedimientos. Una “imprudencia” demasiado habitual. Dos visiones del mismo hecho.

Gennaro Carotenuto
El lunes el primer ministro israelí, Ehud Olmert, se reunió con el presidente de Estados Unidos, George W Bush. Era el primer encuentro bilateral desde el ingreso en el gobierno israelí de la ultraderecha de Avigdor Liberman. El momento era difícil para los dos líderes y el clima había cambiado desde el encuentro de mayo, cuando ambos estaban en el momento de máxima presión contra Irán y el gobierno palestino de Hamas vivía su mayor aislamiento. Hoy Bush perdió la mayoría parlamenaria y Olmert está atrapado por las matanzas en Gaza, y los dos necesitan tiempo para evaluar la nueva situación.

Las decenas de muertos palestinos en Gaza deterioraron la imagen internacional de Tel Aviv. La onu condenó el “ataque injustificado contra civiles indefensos”. La noticia de que las dos principales fuerzas palestinas, Hamas y Fatah, llegaron a un acuerdo sobre el primer ministro del nuevo gobierno de coalición, restituye a los palestinos a la política internacional. El sustituto de Ismail Hanyeh debería ser Mohammed Shobeir, docente de microbiología con un doctorado en Estados Unidos, rector de la Universidad de Gaza, cercano a Hamas aunque no integrante de esta organización, y con excelentes relaciones en la clase dirigente palestina y en la Autoridad Nacional Palestina (ANP). Su nombramiento podría hacer inevitable el fin del bloqueo político y económico impuesto a Palestina por Israel y Estados Unidos. Tanto la Liga Árabe como la Unión Europea presionan en este sentido y las dificultades de Washington en todos los frentes imponen reconsideraciones de todas las estrategias de Oriente Medio. Si para Israel, Palestina está en el primer lugar de sus prioridades, para Washington el orden de prioridades va modificándose. Irán, y por consiguiente Siria, le preocupan más. Durante la semana, las palabras del primer ministro británico, Tony Blair, que pidió a Damasco y a Teherán que colaboren en la recomposición del cuadro de Oriente Medio asolado por la guerra iraquí, han dejado mal parados tanto a Washington como a Tel Aviv. Especialmente Olmert condiciona el diálogo con Siria a un nuevo aislamiento de Hamas, que responde sólo a intereses internos de las derechas que gobiernan Israel y Estados Unidos.
El ingreso de Liberman al gobierno de Olmert hace caer la máscara centrista y abre espacios políticos a su izquierda. El escritor David Grossman, que perdió un hijo en la aventura libanesa del pasado mes de julio, en una gran manifestación para recordar el aniversario del asesinato de Ytzhak Rabin, dijo que la apertura del diálogo con Damasco es una de las vías posibles para salir del pantano.

FALLA TÉCNICA. Para Ehud Olmert la semana del viaje a Washington había sido difícil. Tuvo que desafiar la lógica y la decencia para defender una acción indefendible cometida por el Tsahal (ejército israelí), que disparó sobre una familia palestina, los Athamnah. Murieron 18 personas, incluida una niña de un año. La familia vivía a 500 metros del lugar de donde se supone que se habían disparado misiles Qassam contra territorio israelí. La masacre es parte de la campaña militar contra Gaza, emprendida el pasado 25 de junio, cuando el cabo del ejército israelí Gilad Shalit fue capturado por milicianos palestinos. La guerra de baja intensidad israelí ya ha causado la muerte de más de 300 civiles palestinos y alrededor de mil heridos. Avigdor Liberman, flamante nuevo miembro del gobierno israelí, exige que contra los palestinos Israel utilice las mismas técnicas de tierra arrasada que usó el ejercito ruso en Chechenia. El Tsahal no da marcha atrás.