BRECHA – Arabia Saudita: lujos y debilidades de una gerontocracia

CUENTAN QUE LA última vez que Fahd fue de vacaciones a su ?casa? de Marbella, prácticamente una ciudad privada dentro de la ciudad española, llegó con siete aviones, dos de los cuales transportaban únicamente su equipaje. En la pista lo esperaban 104 autos, entre Rolls Royce, Cadillac y Mercedes. Para alojar a los menos íntimos de sus más de 500 acompañantes había reservado unos cuantos hoteles cinco estrellas, a un costo global de 2 millones de euros por noche. Uno de los aviones iba y venía del Golfo trayendo dátiles fresquísimos, otros productos del país y agua de La Meca, la única que el rey bebía. En una estadía anterior, en 1987, a cada uno de los periodistas presentes Fahd les había regalado un Rolex de oro. Se puede entender por qué la ciudad de Marbella proclamó tres días de duelo por la muerte del soberano: se dice que los dignatarios de la familia real gastaban 5 millones de euros por día en las boutiques de la ciudad.
Fahd nació al inicio de los años veinte y reinaba desde 1982. Su padre, Abdul Aziz Ibn Saud, fue el fundador del moderno reinado, que toma nombre de la familia Saud. Ésta dominaba la vida política de la península desde el siglo XVIII. Fahd es el cuarto hijo de Abdul Aziz que se convierte en rey. A su muerte, deja un país suspendido entre modernidad y medioevo, donde el petróleo asegura ingresos por más de 100 mil millones de dólares al año. El credo wahabita, la corriente más conservadora dentro del islam, ha sometido al país de donde es originario Osama bin Laden al imperio de la sharia, la ley islámica más pura y dura. En este país no existen sindicatos y los partidos políticos están prohibidos, al tiempo que la condición de la mujer es especialmente denigrante. Nadie prevé que Abdullah, o en su defecto Sultán, introduzcan modificación sustancial alguna en la estructura socioeconómica del país, dominada por los 5 mil integrantes de la familia real, ni en las relaciones con Estados Unidos. Sin embargo, ese panorama no parece asegurado vista la incapacidad de un régimen autocrático de renovarse en un el cambiante escenario en la región.